Lobbies en la Unión Europea

Una coalición de organizaciones de la sociedad civil europea denunció que el registro voluntario de grupos de presión creado por la Comisión Europea, presenta grandes deficiencias y no servirá para promover la transparencia en la UE. Entre otros fallos, critican que no sea obligatorio y que no requiera revelar el nombre de los lobistas. Desde los productores de cerveza hasta las ONG, pasando por los fabricantes de coches y todos los sectores imaginables, en Bruselas opera un oscuro enjambre de lobbies que intentan presionar a las instituciones europeas para intentar que legislen en su favor. De ellos, el público sabe poco, desconoce quiénes son y sobre qué cuestiones intentan influir en los responsable políticos de la UE.

Consciente de la situación, la Comisión Europea puso en marcha en junio un registro voluntario de lobbies, que se puede consultar sin restricciones en Internet, en el que estas organizaciones deben especificar cuál es su misión, a quiénes representan y cómo se financian. Esta medida se enmarca en la Iniciativa Europea en Favor de la Transparencia, lanzada en 2005 para que las instituciones europeas se sometan más y mejor al escrutinio de los ciudadanos. Quién manda en la UE